Mira ahora el testimonio en vídeo de Conchi Ponti
«La palabra sentimiento es definida como acción y efecto de sentir o sentirse.
Cuando entras en una granja solo ves animales que se sienten, animales que están sintiendo la tristeza, el abandono y el dolor de una forma que me aterroriza descubrir. El mundo en el interior de una granja es lento, frío y asfixiante. Los animales viven con la muerte, en cada rincón de ese lugar en el que habitan, cuando comen, cuando beben, cuando caminan, cuando gritan, cuando dan a luz a sus hijos, cuando despiertan, cuando me acerco. Ellos ya están cansados de saber, de saber que no hay nada bueno por llegar.
Algo que siento en el interior de una granja son los contrastes, los contrastes más inimaginables están allí, donde la maternidad es privación, donde la infancia es miseria, donde los gestos son contusiones, donde el espacio siempre es una prisión, donde la supervivencia no dejará de ser sentencia de muerte.
Cuando entro en una granja, mi corazón se divide entre los cientos o miles de individuos que encierra y en cierto sentido, esa parte de mi se queda allí, con ellos.»
