| Lunes 5 Julio 2010
Cogieron a Mel y nos mostraron las costras de su cuerpo. Su mirada transmitía ya miedo e incertidumbre. De repente, el granjero decidió poner fin a su vida y, en un gesto de ostentación y poder, lo apaleó contra una escalera. Lo soltó y lo tiró al suelo, y siguió con normalidad su tarea. Mel seguía vivo, agónico, desangrándose por la boca y pataleando en una angustia dolorosa.
| Lunes 28 Junio 2010
«Como cada persona sensible al sufrimiento de los demás animales, he visto en el curso del tiempo muchas imágenes y muchos vídeos sobre explotación, crueldad y torturas. Conociendo esta realidad me sentía preparada para encontrar lo peor, pero he comprobado posteriormente que siempre hay algo tan terrible que te hace dudar de tu capacidad para soportarlo.
Cuando mis compañeros me pidieron si quería ver con mis propios ojos aquello que antes había visto sólo a través de terceros, y documentar yo misma estas atrocidades, pensé «No, no tengo ganas, es imposible querer ir a donde encontrarás algo que seguramente te afectará profundamente». Pero el punto clave es que se trata verdaderamente de un deber personal, debemos abrir los ojos aunque no nos guste lo que vamos a ver y tenemos que hacer todo lo posible para que la información obtenida alcance el mayor número posible de personas.